Según un nuevo estudio realizado en la Universidad de San Francisco, solo es necesario que consumas cocaína una vez para que tu cerebro se vea afectado de una forma inquietante: una dosis consigue interferir en tu cerebro de manera que limita tu capacidad para decidir por ti mismo. He aquí uno de los motivos por los que se presenta la adicción a esta substancia.
El estudio ha sido realizado utilizando ratones de laboratorio a los cuáles se les realizó una serie de escáneres sobre el lóbulo frontal de sus cerebros. Esta zona cerebral es la que está relacionada con la toma de decisiones y la memoria.
Al suministrar por primera vez una dosis de cocaína a una serie de ratones se comprobó que el lóbulo frontal presentaba un crecimiento de dentritas, prolongaciones de las neuronas que reciben impulsos nerviosos.
Según los investigadores, lo que ocurre en las neuronas con este crecimiento dendrítico es reorganizar el cerebro para que consiga más cocaína, hasta el punto de que se convierte en una prioridad por encima de otras necesidades básicas en un ser humano. Esto significa que te vuelves un adicto desde el principio y no puedes hacer nada para evitarlo.
De hecho, los científicos comprobaron que los cambios no solo se produjeron a nivel orgánico en los cerebros de los ratones, sino en su comportamiento.
Para comprobarlo colocaron dos pequeñas recipientes en una jaula con ratones. Uno de los recipientes emitía un olor que repelía a los ratones. A partir de ahí, suministraron cocaína a los roedores y luego colocaron algo de droga en el recipiente con mal olor.
La respuesta de los ratones es previsible: a pesar de que el recipiente les causaba desagrado se acercaban a él, pero la cosa no quedaba ahí. Cuando los científicos retiraban más tarde la cocaína del recipiente desagradable, los ratones seguían acercándose a ella buscando más droga. Posiblemente te recuerde al comportamiento de algún drogadicto.
Con este estudio demuestra cómo, al consumir una sola dosis de cocaína, tu cerebro queda limitado y la droga domina tu pensamiento y voluntad.
El estudio ha sido realizado utilizando ratones de laboratorio a los cuáles se les realizó una serie de escáneres sobre el lóbulo frontal de sus cerebros. Esta zona cerebral es la que está relacionada con la toma de decisiones y la memoria.
Al suministrar por primera vez una dosis de cocaína a una serie de ratones se comprobó que el lóbulo frontal presentaba un crecimiento de dentritas, prolongaciones de las neuronas que reciben impulsos nerviosos.
Según los investigadores, lo que ocurre en las neuronas con este crecimiento dendrítico es reorganizar el cerebro para que consiga más cocaína, hasta el punto de que se convierte en una prioridad por encima de otras necesidades básicas en un ser humano. Esto significa que te vuelves un adicto desde el principio y no puedes hacer nada para evitarlo.
De hecho, los científicos comprobaron que los cambios no solo se produjeron a nivel orgánico en los cerebros de los ratones, sino en su comportamiento.
Para comprobarlo colocaron dos pequeñas recipientes en una jaula con ratones. Uno de los recipientes emitía un olor que repelía a los ratones. A partir de ahí, suministraron cocaína a los roedores y luego colocaron algo de droga en el recipiente con mal olor.
La respuesta de los ratones es previsible: a pesar de que el recipiente les causaba desagrado se acercaban a él, pero la cosa no quedaba ahí. Cuando los científicos retiraban más tarde la cocaína del recipiente desagradable, los ratones seguían acercándose a ella buscando más droga. Posiblemente te recuerde al comportamiento de algún drogadicto.
Con este estudio demuestra cómo, al consumir una sola dosis de cocaína, tu cerebro queda limitado y la droga domina tu pensamiento y voluntad.
Comentarios
Publicar un comentario
Que estas pensando?